Aprendamos a Ser Pacientes
Ser paciente no significa aguantar todo lo que te
hacen los demás, tampoco consiste en permitirles a
otros, que abusen de ti o irrespeten tus derechos. Por
el contrario, ser paciente implica colocarse en el
lugar de la otra persona para comprender un poco sus
actitudes o su comportamiento, también implica manejar
tus emociones para evitar el responder exageradamente
a algunas situaciones o circunstancias de tu vida.
Ser pacientes nos da la oportunidad de servir como un
elemento conciliador muchas veces, tomando en cuenta
no solo nuestras necesidades personales sino las de
los demás. Ser pacientes nos da la posibilidad de
mantener el equilibrio personal con más facilidad,
recordando que todo pasa y que al mismo tiempo todo
representa una oportunidad de aprender algo nuevo o de
poner en práctica algo que ya sabemos. Además, si
no puedes hacer que cambie una situación, más vale que
la aceptes con paciencia para que no te afecte tan
profundamente y así puedas obtener con calma e
inteligencia el mejor beneficio de esa situación.
La paciencia es una de las herramientas indispensables
para disfrutar de una buena relación. Aceptar y
respetar las diferencias personales, nos permitirá ser
mas pacientes y tolerantes cuando los demás actúen o
se comporten de una manera diferente a cómo
esperábamos que lo hicieran. Cuando te dejas llevar
por la impaciencia, la mayoría de las veces terminas
teniendo una actitud intolerante y agresiva, hiriendo
con tus palabras, comentarios y actitud, hasta a las
personas que mas amas. Aprende a manejar el caballo
desbocado de tus emociones negativas y conviértete en
una persona mas comprensiva, tolerante y paciente con
quien otros puedan compartir.
CLAVES PARA TENER LA PACIENCIA:
CUENTA HASTA 100 SI FUESE NECESARIO. Es muy importante
que mantengas la calma, para que puedas evitar tu
reacción negativa. Tomate el tiempo necesario para
serenar tus emociones y recuperar la claridad mental
que te permita actuar de la mejor manera.
COLÓCATE EN EL LUGAR DEL OTRO. Recuerda que no todas
las personas podrán actuar o comportarse como tú lo
harías. Por eso aceptar sus diferencias y fijar tu
atención en sus cualidades te ayudará a mejorar tus
relaciones de trabajo, de estudio y de amistad.
ANALIZA LA SITUACIÓN Y ENCUENTRA EL LADO POSITIVO.
Pensamientos como: Podía haber sido peor, no todo el
mundo piensa igual que yo, bueno todavía tiene
solución, vamos a resolverlo con calma... son algunas
de las frases que te ayudan a serenar tus emociones y
a tener una visión más positiva.
SE PACIENTE CON TUS NIÑOS. Muchas veces esperas tanto
de ellos que se te olvida considerar sus limitaciones
y su corta edad. Actúa calma y con amor,
especialmente cuando cometan un error. Reconocer y
aceptar sus limitaciones te permitirá ayudarlos
eficazmente para que puedan superarlas y al mismo
tiempo tu respeto y cariño los hará sentir queridos y
seguros de poder superarlas.
Suelta el pasado, deja de preocuparte por el futuro,
vive el presente, la vida es maravillosa, todo va a
estar muy bien.