Volver a Conectarnos con el lado Amable de la Vida
Después de haber pasado por alguna situación difícil, la mayoría de las veces nos quedamos atrapados en la afectación que nos produjo esa experiencia. Nos lamentamos, nos resistimos a aceptar lo sucedido, buscamos culpables, tratamos de vengarnos, nos resentimos, nos sentimos victimas, indefinidamente, sin darnos cuenta de que, con cualquiera de estos comportamientos o actitudes, extendemos nuestro sufrimiento, negándonos la posibilidad de reconocer todo lo bueno que también esta ocurriendo en las otras áreas de nuestra vida.
Si tan solo pudiéramos poner un poco de distancia entre nosotros y la experiencia difícil que tuvimos, para recuperar la calma, es decir, para tranquilizar la mente y serenar nuestras emociones, podríamos seguramente reflexionar sobre esa experiencia objetivamente, de manera que pudiéramos entregarnos a la tarea de aceptar lo sucedido, reflexionar para aprender algo positivo y mostrarnos dispuestos a soltar y a dejarla atrás. En este proceso, desarrollar la capacidad de observar y reconocer todo lo bueno y lo positivo que también esta sucediendo en las otras áreas de nuestra vida, nos ayuda a superar lo vivido y a abrirnos a nuevas y mejores experiencias y oportunidades, todo, cuando nos volvemos a conectar con el lado amable de la vida.
Podríamos comenzar, haciendo el ejercicio de relativizar lo ocurrido, para reconocer y resaltar conscientemente los elementos positivos, que pueden suavizarnos esa experiencia, por ejemplo: fue difícil, pero lo resolvimos; nos perdimos, pero llegamos; fue totalmente inesperado, pero lo manejamos bien; fue muy complicado, pero estuvimos protegidos; fue muy largo, pero aquí vamos… en fin, una practica, que nos ayude a volvernos a sentir, esperanzados, motivados, animados y confiados en nosotros y en la Divinidad. Por supuesto, hay experiencias muy difíciles de afrontar y de superar, como la perdida de un ser querido, o la perdida de la salud… estas requieren que hagamos un proceso de duelo y aceptación, para que podamos superarlas y seguir adelante con la vida. La Fe, la esperanza, una actitud optimista y positiva, el amor de nuestras otras personas queridas, una buena orientación y el tiempo, terminan siendo muchas veces, las mejores herramientas para conseguirlo.
Pasos para conectarnos de nuevo con el lado bueno de la vida:
Aceptar y soltar lo pasado. Trabajar en la aceptación nos coloca en la posición de vivir consciente y voluntariamente el proceso de soltarnos, para cerrar ese capitulo de nuestra vida y abrir uno nuevo. Los ciclos hay que cerrarlos con conciencia, voluntad y madurez para que podamos dejarlos en el pasado.
Reconocer y valorar todo lo bueno. Levanta la mirada y observa a tu alrededor, tienes muchas otras cosas buenas y positivas que te suavizan la vida, y por las cuales sentirte agradecido. Además, muchas veces tenemos mas de lo que en realidad somos capaces de reconocer, valorar y disfrutar. Aprende superar y soltarte del recuerdo de las experiencias difíciles.
Rescatar los sueños, tener un propósito. No permitas que la mente te lleve a recordar lo sucedido, mucho menos tus experiencias fallidas, distráela y regresa tu atención siempre al presente, enfócate en darle dirección y empuje a tu vida. Recuperarte y ganar autoestima, los hijos, la pareja, un proyecto, una meta, un propósito personal o un sueño, pueden ser lo suficientemente atractivos como para levantarnos y ponernos en acción de nuevo.
Tener pensamientos positivos. No importa lo difícil que te parezca lo que esta pasando, mantén siempre una actitud positiva y entusiasta, no te dejes hundir. Si te acompañas de pensamientos positivos y mantienes una buena actitud, podrás encontrar las alternativas y la salida más fácilmente. Piensa en que todo pasa y en que siempre hay una solución.