La Importancia de la Generosidad
En estos tiempos tan materialistas y convulsionados por los cambios, la ambición de poseer y la necesidad de encontrar seguridad, hacen que las emociones mas negativas, como: el temor, el egoísmo, la envidia, la venganza, la mentira, la indolencia, la apatía, la violencia… se desatan dentro de la mayoría de las personas, haciendo que su comportamiento equivocado sea la causa que mantiene y acrecienta el malestar general. Hay días en que salir a la calle, nos da una sensación de estar en el medio de la jungla, donde el vivir para muchas personas se torna una tarea difícil de cumplir.
La generosidad y el altruismo forman parte importante de la naturaleza humana, y aun cuando la educación que recibimos durante la infancia y las condiciones que acompañaron nuestro crecimiento y desarrollo, hayan sido adversas y negativas, estos valores se encuentran presentes y dormidos dentro de cada uno de nosotros. La inclinación a la ayuda solidaria y el interés por el bienestar de los demás, es innato en el ser humano.
Todos podemos recordar casos de personas que sacrificaron parte de su tiempo, de sus deseos e inclusive de sus necesidades y hasta su vida para ayudar a alguien, en momentos de emergencia. ¿El motivo? Esa inmensa fuerza interior, que nos impulsa a hacer actos generosos y heroicos por otros. ¿La recompensa? El placer inmenso de colaborar y contribuir, para mejorar la sociedad donde viven.
Son muchas las acciones generosas que podemos realizar a diario, como: detenernos a ayudar a una persona que en la calle precisa orientación, salir unos minutos mas tarde del trabajo para colaborar con un compañero que necesita terminar un trabajo urgente, preparar un par de platos extra de comida caliente para compartir con esas personas que sabes que lo necesitan, hacer algún tipo de colecta para reunir ropa y compartirla con otras personas mas necesitadas que tu, participar en algún tipo de proyecto que trabaje por el bienestar de alguna comunidad cercana a la tuya, hacerte voluntario por unas horas a la semana en algún hospital público.
La mayoría de las personas que tienen conductas generosas, comparten un mismo anhelo: el de inclinar la balanza para favorecer siempre a los mas necesitados y contribuir con el bienestar de los demás.
La empatía, es la capacidad de ser consciente de los sentimientos, del sufrimiento y de las necesidades de las personas. También nos permite colocarnos en el lugar de las demás, para comprender su comportamiento y muchas de sus reacciones. Aumenta nuestro nivel de tolerancia y nos ayuda a desarrollar la humildad suficiente que nos impide sentirnos superiores y desconectados de los demás.
También nos ayuda a vivir la relación con nuestros familiares, a través de la gratitud y el reconocimiento de todo lo bueno que nos dieron, sanando cualquier recuerdo negativo, para que brote el amor incondicional que sane y fortalezca el vinculo que nos une.
La generosidad es un camino directo hacia nuestro crecimiento personal.